Un paso más para alcanzar la Accesibilidad Universal al Patrimonio cultural: ” Los sueños del acero en el camino/Altzairuaren ametsak bidean”

Hace un año el Parlamento aprobaba la Ley Foral 12/2018, de 14 de junio, de Accesibilidad Universal que amplía en su capítulo II los ámbitos de aplicación incluyendo a la Administración de Justicia, el patrimonio cultural, las actividades culturales, deportivas, de ocio y el empleo.



Con el título "Los sueños del acero en el camino/Altzairuaren  ametsak bidean" del artista Francisco García Lasaosa se ha presentado una exposición artística que ha contado con treinta esculturas de acero cargadas de simbología y con una fuerte carga de reivindicación social. El programa de esta colección artística ha estado disponible en braile, lectura fácil, en castellano, euskera, inglés y francés. Esta exposición se lleva acabo dentro del programa de actividades del proyecto PLUS D´ ACCMejora de la Accesibilidad al Patrimonio Cultural Material e Inmaterial, desarrollado junto con la asociación bilbaína AVIFES y la asociación francesa EVAH, y gracias al apoyo económico de la Eurorregión Nueva Aquitania – Euskadi – Navarra y de Euskarabidea. Por tanto, se trata de otra de las acciones llevadas al amparo del proyecto Jacob@access, liderado por el Ayuntamiento de Jaca, que tiene como objetivo la creación de una red transfronteriza para la accesibilidad de las personas con discapacidad a la cultura y al patrimonio de las localidades que atraviesa del Camino de Santiago. En este proyecto, Koiné-Aqualitas junto con el Ayuntamiento de Pamplona colaboran con la mancomunidad francesa de Iholdi-Oztibarre y otras tres entidades del ámbito de la accesibilidad: Asociación EVAH, Atades Huesca.

El escultor, Francisco García Lasaosa (Huesca), empezó a trabajar con el hierro en 1967, posteriormente viajó a Barcelona, donde siguió profundizando en el conocimiento y la creación artística con base en este metal. Tuve la suerte de compartir  con Francisco sus opiniones sobre el manejo y empleo del hierro para plasmar sus ideas y creatividad en el grupo de obras que se mostraron durante la exposición. Lo que más le gusta a Francisco de este trabajo es “ver el fuego y el sonido que hace el acero al golpearlo y es lo que pretende trasladar con la contemplación de su obra, la pasión y el disfrute sensorial. De ahí, la importancia de la accesibilidad de la exposición escultórica, que pudo ser observada desde los distintos sentidos, por su propia naturaleza holística. Como expresa el artista “las piezas son el resultado de un encuentro entre dos almas”.

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